Eva Aguilera nos habla de tres pasos para gestionar las emociones.
El primer paso sería sentir la emoción, empezar por observarla, y darte el permiso para sentirla. El segundo sería expresarla, ponerle nombre para poder gestionarla. Y el tercer paso, tiene que ver con actuarla: actuar coherentemente con la energía de esa emoción.
Tres pasos sencillos y útiles para alinear nuestras emociones con nuestros propósitos.